El Electroencefalograma fue descubierto por Hans Berger en 1931.
Se trata de cambios del potencial (voltaje) producidos en las neuronas piramidales de la corteza cerebral (a). Estas neuronas en forma de pirámide (b) tienen sus dendritas apicales orientadas verticalmente (c) y luego se ramifican horizontalmente en las capas superficiales (d).
Los potenciales detectados por los electrodos de aparato de Electroencefalograma (EEG (e) tienen una duración de 77 a 125 ms (f) por lo que son la suma de los potenciales postsinápticos que duran 1 ms.
Dada la complejidad de la actividad eléctrica de las neuronas sería lógico que las ondas registradas por el EEG fueran un trazado caótico, pero lo que ocurre, especialmente cuando cerramos los ojos, es que el trazado suele contener una importante cantidad de actividad perfectamente rítmica. Por ello se piensa que estos potenciales mencionados se producen de forma rítmica (g). El marcapasos responsable de esta ritmicidad se encuentra en el tálamo (h)(y funciona como un circuito oscilante, como el volante de un reloj (i). Este ritmo es normalmente de 9 ciclos por segundo y se llama ritmo alfa (g).
El ritmo alfa de 9 ciclos por segundo está presente hacia los 9 años de edad. A los 4 años pueden verse pequeños fragmentos del ritmo alfa en niños normales.
El ritmo está formado por la sincronización de redes neuronales mutuamente interconectadas (j). Es importante saber que el EEG representa no el funcionamiento de las neuronas individuales sino el de redes amplias de neuronas que en un momento dado se encuentran en un funcionamiento “sincronizado”.
En estos circuitos neuronales que están formados por neuronas del tálamo en conexión con neuronas de la corteza cerebral, algunas neuronas de tálamo tiene un dispositivo de entrada de calcio en la célula de modo que cuando ha entrado una determinada cantidad la neurona se dispara (despolariza sola) con lo que actúan como temporizadores y serian las responsables de los ritmos cerebrales.
La función de estos ritmos oscilatorios es la de “cerrar o abrir puertas” para que la actividad de las neuronas pueda comunicarse entre sí.
Como las neuronas son células con “mucho trabajo” existen unas células nodriza que se encargan de alimentarlas. Estas células se llaman ,en conjunto, células gliales (k). Siempre se ha creído que no tenían actividad eléctrica pero hoy sabemos que debido al flujo de iones potasio (K+) también tienen un potencial de membrana fluctuante que va a producir un efecto amplificador.
El Electroencefalograma (EEG) es el único instrumento de que disponemos actualmente para aproximarnos verdaderamente al funcionamiento cerebral en tiempo real, es decir, a escala de milisegundos.
Equipo del INVANEP